El miércoles 29 de septiembre, Córdoba amaneció con el clima
enrarecido. La noticia de la toma de los edificios de 5 colegios secundarios,
las asambleas en otros tantos y los cortes de calle impactaron profundamente la
cotidianeidad de la ciudad.
Las imágenes mostraban lo que desde hace rato los
estudiantes secundarios venían viendo en el día a día de los colegios:
edificios destruidos, muchos de ellos inundados y con techos partidos. Pero
resulta que no sólo era ese el motivo.
El rechazo al ante proyecto de reforma de la Ley de Educación Provincial
8113 (elaborada por el PJ cordobés junto a Arcor, Minetti, el Concejo de
escuelas Católicas, la
Universidad Católica y la Empresarial Siglo
XXI) empezó a sonar entre los argumentos, que una y otra vez, defendían los
jóvenes secundarios.
Dialogando con distintos estudiantes, padres, docentes e
instituciones ligados al que hacer educativo en esta ciudad, podemos resumir los principales puntos de la lucha de los estudiantes
secundarios. Están luchando por:
1) Por una educación pública, gratuita y laica. El Proyecto
de ley elaborado establece la posibilidad que las instituciones educativas incorporen la materia Religión cuando en rigor la
educación pública debe ser laica.
2)- Porque el Proyecto mencionado limita la participación y
la existencia misma de los Centros de Estudiantes, al disponer que queda a
criterio de la Dirección
de los establecimientos la existencia o no de dichas asociaciones
estudiantiles.
3) Por un aumento del presupuesto educativo.
4)- Los estudiantes quieren rediscutir puntos de la ley en
cuanto la relación entre la educación
pública y las empresas privadas.
5)- Exigen una mayor participación de la comunidad educativa
(docentes, padres y alumnos) en la discusión del proyecto, ya que fue elaborado
por una reducida comisión. (Recordar que el proyecto fue elaborado por el PJ
cordobés junto a Arcor, Minetti, el Concejo de escuelas Católicas, la Universidad Católica
y la Empresarial
Siglo XXI- ademas suena un poco irónico que estos sectores
hablen de educación publica y gratuita)
6) -También se lucha por problemas edilicios, pero el mayor
objetivo es por una participación activa de los estudiantes y toda la comunidad
educativa en la discusión de una ley tan importante.
Es sabido que además de los edificios en mal estado hoy los
jóvenes se encuentran con que 2 de cada 10 pibes en edad escolar esta fuera del
sistema educativo, que los salarios docentes apenas alcanzan para sobrevivir,
que todos los días los estudiantes cursan en aulas superpobladas, que a la
universidad no llega la mayoría, que solo egresa el 6%, etc.
La propuesta de reforma de ley se encuentra lejos de
replantearse, cuestionarse y proponer alternativas de este modelo vigente para,
por lo contrario, sigue promoviendo y asegurando la realidad lamentable con la
cual los estudiantes conviven día tras día.
Los estudiantes cansados de escuchar promesas de obras que
nunca llegan, cansados de promesas de aumento de presupuesto que no existe,
cansados de ser ninguneados por las autoridades, decidieron tomar las riendas y
salir a disputar lo que les corresponde.
Por esos sus carteles dicen "Basta de promesas".
Se han cansado de escuchar promesas. Necesitan realidades.
Un nuevo movimiento social juvenil camina las calles de
Córdoba, así como de otras ciudades de la Argentina, revitalizando la práctica de la Política e interpelando
un discurso hegemónico que sitúa a la juventud en un lugar que la propia
historia se ha encargado de desmentir. Hoy, los más jóvenes de nuestros jóvenes
reclaman su lugar en un debate público que en los últimos años ha venido
incluyendo a diferentes sectores populares en la construcción de una democracia
más participativa, pero que hasta ahora no los incorporaba. Detrás de las tomas
de colegios, emerge parte del sujeto político que va a transformar la Argentina y que ya lo
está haciendo. Por esto, por la construcción de una nueva democracia en un
continente que postula la caída de las viejas cadenas de la dependencia y la
sumisión, por el fortalecimiento de los movimientos sociales y las fuerzas
organizadas de los pueblos, Carta Abierta Córdoba apoya y sostiene el
movimiento de los estudiantes secundarios cordobeses que en estos momentos,
lejos de rechazar la educación, la defienden; lejos de huir de los colegios,
permanecen en ellos; lejos de esperar que otros definan su lugar en la
sociedad, toman su destino en sus propias manos.
Nuestros jóvenes secundarios están luchando por una
educación pública, gratuita y laica.
En definitiva por el futuro de la educación pública en
Córdoba y la Argentina.